jueves, 3 de octubre de 2013

raudo #9

En una de las pantallas de televisión que corona el amplio ventanal del estudio de radio están emitiendo el nuevo videoclip de Miles Cyrus, ese en el que la cantante -en bragas y sujetador- se deja atosigar por una enorme bola negra de demolición de edificios. Al otro lado del cristal, tres locutores de unos cuarenta años, grandes, sonrientes, ufanos, hablan de las marchas de los maestros contra quién sabe qué reforma del gobierno, manifestaciones que están paralizando la ciudad y dando lugar a altercados y detenciones. Una chica de producción acaba de entrar en el estudio y de depositar delante de cada uno de los locutores un ejemplar de mi novela. Mientras hablan o dejan hablar a otro, cada locutor toma el libro, mira la portada, lo voltea y lee en diagonal la contraportada, lo hojea por sus páginas finales sin abrir el volumen del todo y vuelve a dejar el libro sobre la mesa. Dos o tres minutos después de observar estas inspecciones sumarísimas de mi novela, paso con ellos para realizar la entrevista.

Que resulta excelente.