martes, 28 de abril de 2009

Memories can´t wait

anotaciones

La ida, con MGA. Hablamos. Miro a mi izquierda. Una chica lee sola. Miro el libro, reconozco que es de Lengua de Trapo. Me fijo en el borde de la solapa. Digo: Ese libro es mío. Azul con manchas blancas: Tatami. La chica levanta la vista (está a menos de 1 m de distancia de nosotros): Sí, es tuyo. Nos cuenta: me he sacado el libro en la biblioteca de Usera y me he dicho me voy a La ida a leer que seguro que me encuentro con Alberto Olmos. Yo: No vengo mucho por aquí. Ella: Ni yo. Yo: Ah. Ella: Voy a seguir leyendo. Yo: Ok.

Ella sigue leyendo mi libro a menos de 1 m de mí.

Media hora después se levanta y recoge sus cosas. Yo: ¿Te vas? Ella: Sí, ya me lo he acabado. Yo: Qué velocidad. Ella: Me ha gustado mucho, aunque he visto dos erratas. Yo: ¿Eres filóloga? Etc.

Se va.

MGA y yo hablamos de nuestra fama diminuta.

Cenamos en El Maño.

Horas después, en el Jose Alfredo, le digo a MGA: Ese es David Byrne. MGA: No. Yo: Sí, sí, es David Byrne. Antes hemos visto a Pablo Carbonell y hemos estado de acuerdo en que era Pablo Carbonell. Pero con David Byrne es más difícil creérselo.

Yo: Se lo voy a preguntar. MGA: Venga.

Yo (a David Byrne): Are you David Byrne?
David Byrne (a mí): Yes.
Yo (a David Byrne): Thank you.

Yo (a MGA): Es David Byrne.
MGA (a mí): 5.000 puntos para cada uno.

Nos encantan los famosos.